La flota continúa avanzando en un rodeo multitudinario que apenas recorta millas

Vela

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Los modelos meteorológicos guían a la flota hacia una “autopista” que se encuentra al nordeste de su posición en forma de vientos de componente norte con los que se encontrarán en los próximos días. Esta vía de alta velocidad lleva directo a Nueva Zelanda, evitando una amplia zona sin viento que se extiende entre el pelotón y la meta de la Etapa 4.

Al frente de la provisional figura el Sanya, el barco más al sur y por tanto más cerca de Auckland en millas a destino. Pero la referencia de todos no es ahora Auckland, sino la “autopista”, y el mejor situado para incorporarse a ella es el CAMPER, la punta de flecha de los cinco barcos que siguen ganando nordeste. Todos ellos navegan a velocidades de 12-14 nudos en vientos de 15-20 nudos de componente sureste.

El PUMA es el único que no sigue la estela del CAMPER, y gana latitud paralelo a la costa de Taiwán. Su navegante Tom Addis explicaba esta mañana desde a bordo que confía en encontrar al norte la catapulta que les permita superar a sus rivales cuando toque apuntar las proas al sur, directas a destino. De momento, está 18,5 millas más lejos de Auckland que hace 24 horas. Y continúa “restando”.

El Telefónica remonta desde esta mañana respecto al líder Sanya, y es quinto por detrás del CAMPER. Pero entre el barco de Iker Martínez y el de Chris Nicholson hay más de 80 millas de distancia real, y tanto la velocidad como el ángulo de ambos es muy similar. La amenaza inmediata para el CAMPER se llama Groupama, y acecha apenas a 12 millas por su aleta de estribor.