Marcadores con resultados online de futbol, tenis y baloncesto

 MAY
 28

Día 15 de la Aventura de Jonás: conociendo Tánger

Durmiendo en el suelo de una casa en Tánger - Ciclismo

 
del.icio.us Meneame Google
Día 15 de la Aventura de Jonás: conociendo Tánger

Jonás no cuenta en su crónica 15 cómo se ha integrado conviviendo con gente de la ciudad de Tánger:

 

Imaginad una cultura totalmente diferente, un dolor muy fuerte en una pierna y  estar en una zona que no sabía ni donde estaba. Además no tenía idea donde dormir y tenía por delante más de 4 días por Marruecos. Ante esto solo había una vía “lógica y racional” y no es otra que intentar disfrutar, fiarme dentro de lo posible y ver lo que el destino me podrá deparar.  Y es que fiarte de una persona por muy buen feeling que te dé en otro país y con todas estas variables no es del todo fácil. Y más cuando empezáis andar durante 20 minutos y cada vez os vais alejando más de la zona más urbanizada. Llevábamos andados más de 10 minutos y mi sentimiento de desconfianza iba aumentando. Después de andar 20 minutos y a las afueras de la ciudad me comentó que en una zona de edificios es donde vivía.

 

 

No me lo podía creer, vivía en una zona de edificios que se estaban construyendo!! Que los mejores accesos era un camino lleno de charcos, donde había cabras y la suciedad desbordaba por todos los lados!!  Estaba alucinando en colores la sensación de desconfianza iba aumentando poco a poco! Andamos entre los edificios y había un chico con un puestecito de frutas y mi amigo se puso hablar con él. Me dijo que me daban un zumo de naranja natural de bienvenida!!?!?! ¿De bienvenida? Pfff yo no entendía nada pero el zumo me lo bebí:

 

 

Estuvimos un rato hablando de buen rollo en inglés, me transmitían buen feeling pero dentro de mi había mucha desconfianza aunque no la transmitiese siempre iba mirando la bici de reojo. Cuando acabamos de hablar me dijo que su casa estaba en el portal justo de al lado. Y que estaban durmiendo sus compañeros de piso. Esto cada vez era más surrealista iba a dormir en un piso a las afueras de Tánger. Con cuatro chavales jóvenes, en una barriada donde no tenían agua caliente, ningún tipo de mueble y la puerta de la casa estaba bastante hecho polvo. Era una situación cuanto menos curiosa. 



Mientras subía por las escaleras  no podía parar de sonreír pensando lo que me encontraría allí arriba. Pero una vez entre y conocí a los compañeros de piso mis miedos y percepciones cambiaron radicalmente.  Recuerdo llegar y todos saludarme de una manera muy afectuosa y ver como ordenaban dentro de lo posible la vivienda. Me ofrecieron té y me empezaron a preguntar sobre España al mismo tiempo que yo les preguntaba sobre Marruecos. Si yo estaba extrañado con la situación ellos estaban igual o mucho más que yo. No sé como describir el momento pero fue una especie de unión entre ellos y yo. Fueron momentos de querer conocer dos mundos tan cercanos pero a la vez tan lejanos de una manera increíble!

 

 

Nada  predeterminado ni con intereses de por medio sino tratándome como uno más de ellos y yo integrándome en su cultura y compartiendo su visión del mundo. Dentro de estos momentos mi amigo Mohamed me comentó que sabía tocar la guitarra con lo que a partir de este momento viví uno de los momentos más especiales en todo este viaje.

 

Después de una conversación muy pero que muy interesante, decidí visitar junto a mi amigo Mohamed Tánger o los lugares que él me quisiera llevar. Me comentó ir a ver unas Grutas de Hércules.  Lugar turístico y medianamente cercano a donde nos encontrábamos. Salimos a una carretera y le pregunte que si íbamos a ir andando y me dijo que no que o cogíamos un taxi de ellos. Un taxi de ellos son todo Mercedes en el que digamos que el trayecto es lineal de un punto a otro y van montadas hasta 5 personas. Cada uno paga un precio según la distancia pero ronda los 4 dihams, unos 40 cts de €.  Como no pasaba ningún taxi decidimos intentar hacer autostop al  2º coche que levantamos la mano. Acababa de hacer autostop en Marruecos!! Esto cada vez era más surrealista! Nos acercaría hasta nuestro destino pero tendríamos que andar después unos 500m . Tiempo más que suficiente para darme cuenta de las dos Marruecos, una pobre y otra rica. 

 

De no saber de mi o lo que me fuera a suceder por la tarde acabar viendo el mar desde aquí:

 

 

Tras estos momentos volvimos hasta el piso donde pasaría mi primera noche en suelo marroquí durmiendo sobre mantas y alfombras como uno más de ellos. Aquí dormiríamos tres personas:

 

 

 Ni en mi mejores sueños hubiese tenido una oportunidad mejor de integrarme en su cultura, en sus tradiciones y en su día a día. Hoy iba a ser un día realmente especial para mi!


Comenta la noticia con Facebook


Publicidad


© 2016 Copyright Ediciones Foro Digital S.L.  |   Aviso legal  |   Contactar