El alemán Tom Andres gana la etapa nocturna de Grandvalira-El Tarter

Nieve

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La Pirena Advance 2012 ha llegado un año más a Grandvalira en un momento de máxima emoción para disputar a partir de las 18:30 horas la tercera y última etapa nocturna del calendario de esta edición. Considerada una de las etapas reinas de la travesía de mushing más importante del sur de Europa, los mushers se han enfrentado en el 12º día de competición a un recorrido largo de 14 kilómetros a través de Grandvalira-El Tarter, duro, rápido y muy técnico entre unas cotas de 1.726 m a 2.282m.

A dos pruebas de la final, el desnivel acumulado de 686 metros ha puesto a prueba la técnica y resistencia de los participantes, mientras que la intensidad propia de las últimas jornadas que definirá el podio de esta XXII edición, ha desembocado en una nueva victoria del favorito y líder de la clasificación general, el alemán Tom Andres (Pirineus Catalunya), que ha reafirmado el liderato al completar la carrera con un tiempo de 30’50”. La victoria lo sitúa a las puertas de conseguir su cuarta Pirena.

En segundo lugar ha llegado su máximo rival en la clasificación general, el español Íker Ozcoidi (Ternua/Canun), que ha realizado un crono de 31’08” y la tercera posición ha estado para el alemán Ullrich Kuhn, con un registro de 32’19”.

Las nevadas y la bajada importante de las temperaturas en los últimos días han permitido recibir a los 25 equipos de trineos y a los 350 perros que forman la Pirena Advance 2012 en unas condiciones excelentes. Como ya es característico de esta etapa, los grandes desniveles que dificultan la realización del circuito hacen que los mushers que compiten en la categoría de skijoring no participen.

Se avanza una hora la etapa de Grandvalira-Grau Roig

La competición marca un ritmo frenético y no se detiene. Mañana por la mañana será el turno de la 13ª y penúltima etapa de esta edición, que comenzará una hora antes de lo previsto, a las 9:00 horas a Grandvalira-Grau Roig. En total, los participantes tendrán que recorrer 12 km (dos vueltas) por un campo de acción que será el circuito de fondo. La cota base será de 1.976 metros y se llegará a un máximo de 2.098 metros.

El desnivel es escaso, pero el trazado dibuja giros y cambios constantes que pondrán a prueba la técnica de los mushers. La salida será un espectáculo para observar la rapidez de los perros pero, sobre todo, la destreza y la fiabilidad que reclama esta etapa.